lunes, 29 de diciembre de 2014

LA DESAPARICIÓN DE LAS ACERAS

Con la desaparición de las banquetas, Metepec pone en riesgo a los peatones, impide el arbolado urbano y desdibuja su perfil de pueblo mágico.
En cada obra nueva, se autoriza el estacionamiento a partir del alineamiento y consecuentemente, no emerge la arquitectura sino el vacío del espacio para los autos, los que se suben a la desaparecida banqueta y pasan por sobre el derecho de los peatones.
Hasta hace poco este fenómeno se apreciaba solamente en las gasolinerías, ahora en largas tiras de comercios diseñados para empobrecer la ciudad y despreciar al transeúnte.
El fenómeno está contagiándose en cada esquina, podríamos apodarlo el síndrome del Oxxo. Las imágenes ilustran en 4 tiempos cómo las banquetas desaparecen, cómo puede resolverse el mismo comercio con un diseño más humano y cómo se puede perfeccionar el cruce peatonal de las calles.
Sólo se requiere ser peatón y desde esa óptica enfrentar el diseño urbano. El auto es una máquina, el ciudadano en cambio es un ser humano. Se puede subordinar uno al otro y conservar lo poco que nos queda de urbanidad.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario