lunes, 15 de noviembre de 2010

Acolman




ACOLMAN. UNA APRECIACIÓN PAISAJÍSTICA

Susana Bianconi, René Sánchez Vértiz, Marcos Mejía López, Horacio Ramírez de Alba.

Publicado en la revista LEGADO¨, año3, no 4, mayo 2008

RESUMEN

Dada la importancia de este complejo conventual del S.XVI en la planicie del Anáhuac, se considera pertinente estudiar su enclave desde el ángulo de la Arquitectura de Paisaje, disciplina que valora los espacios abiertos. El complejo conventual cuenta con tres patios, una huerta y un gran atrio que no han sido estudiados desde esta óptica. Así mismo, su masa construida en medio de un llano labrantío casi deshabitado le confieren características únicas, dignas de comprenderse históricamente y de preservarse


ABSTRACT

Given the importance of this monastic complex of the XVI century at Anahuac’s highland, it is considered pertinent to study its location under the Landscape Architectural perspective, that values open spaces. The monastic complex has three patios, an orchard and a large atrium that haven’t been studied from this point of view. Also, this massive building set in the middle of a flat agricultural plain almost desert, has its own characteristics that must be historically known and kept.


Agradecimientos:
A Don Manuel Morales del INAH por facilitarnos una valiosa fuente documental.
Al Dr. Salvador Galindo del ININ por su interés en el tema y por facilitarnos bibliografía científica.

Orientación
Acolman mira al poniente, con 15 grados virados al norte, igual que la Pirámide del Sol en Teotihucan (figura 1).

Figura 1 : Esquema de la orientación de la Calzada de los Muertos de Teotihuacan y,en la misma escala, el Convento de Acolman (a la derecha) que observa la misma orientación que la ciudad prehispánica.

No se trata de una coincidencia sino del hecho que la traza teotihuacana estaba presente y se impuso en el momento en que los franciscanos primero, y los dominicos después, desplantaron esta inmensa obra plateresca. Cuando los españoles dispusieron nuevos asentamientos sin antecedente alguno, como en el caso de Morelia, lo hicieron según la costumbre grecolatina de observar los puntos cardinales con rigor. Por lo tanto la orientación de Acolman está regida desde la más antigua tradición prehispánica de rotar ligeramente los ejes cardinales en lo que se puede entender como un tributo a la puesta de sol del día más largo del año (figura 2).








Figura 2: En esta figura se señala el ángulo de desplante de diversos sitios prehispánicos y también de algunos poscortesiananos que se alinean según la traza original prehispánica, la excepción es Morelia que fue construida por los españoles sobre tierra yerma siguiendo con precisión los puntos cardinales. Todos los ángulos fueron obtenidos a través de las fotos satelitales de Google Earth.

No sólo Acolman, sino Tlacotepec y Zinacantepec, en el valle de Toluca, se alinean según los asentamientos preexistentes.

“Tales conocimientos (regularidades de los movimientos aparentes de los astros movibles) son indispensables para conseguir los dos grupos de orientaciones que tienen las ciudades prehispánicas, pues hay construcciones en las que la orientación es hacia los puntos cardinales reales y hay otras que se desvían consistentemente 17 grados de esos puntos ( en ambos casos hay un margen de variación que puede llegar a los 3 grados). La magnitud de la desviación y, sobre todo, su constancia, reclaman una explicación. El caso es que las dos orientaciones corresponden a puntos del horizonte donde se pone el Sol en determinados días; la orientación precisa hacia el occidente (y por lo tanto hacia los otros puntos cardinales) está determinada por el punto del ocaso en los días de los equinoccios, mientras que la orientación desviada 17 grados obedece al punto donde desaparece el Sol tras el horizonte en los días que pasa por el cenit del sitio”.(1)
1. Leonardo Manrique Castañeda. (1991) La observación astronómica en el México prehispánico. Eclipses en México SEP. INAH. Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica. pags.41-42

Desde este punto de vista, el de su orientación, Acolman es una obra teotihuacana.

“Muchas de las modernas ciudades heredaron parte de esa voluntad ritual que continúa en la actual traza urbana, en sus calles y en sus edificios erigidos durante varios siglos después. La del Templo Mayor es una historia de esos diálogos involuntarios, secretos, entre una ciudad contemporánea y los dioses prehispánicos: el corazón de la gigantesca ciudad de México sigue latiendo exactamente al mismo ritmo que el antiguo recinto ceremonial de Tenochtitlan.” (2)

El Atrio

El atrio de Acolman es atípico. Se encuentra a 2,80 metros sobre el nivel del templo. Una rampa tendida desvanece el desnivel hacia la puerta de la iglesia y lateralmente, en cambio, dos muros de contención soportan el relleno de tierra. Este curioso nivel elevado provoca que la barda atrial luzca torpemente baja y que la cruz atrial haya sido sacada del atrio y que deba apreciarse fuera del mismo, cruzando una calle transitada.



El nivel de tierra del poblado es superior al del desplante de la puerta atrial y del propio Convento.

Es probable que el material de relleno que se aprecia en las fotos, sea en parte producto de los lodos del asolve de las largas inundaciones que sufrió la comarca y en parte también del hundimiento del pesado inmueble sobre un suelo con baja capacidad de carga.
www.conaculta.gob.mx/saladeprensa/2003/03ene/arqueastrono.htm


“Es comarca fría y umeda la cavecera del pueblo de Aculma, por estar asentado entre asequías de agua, y de mal sereno; los sujetos están en tierra fría y seca, carecen de agua por que no la tienen sino de jahueis; corre el viento sur desde mediados de diciembre asta en fin de mes de marco, causa enfermedad de caueza a los naturales y otros dolores de cuertpo: en el mes de marco corre con gran violencia, a la entrada del agua corre el norte; es enfermo para los naturales, uvnque corre templadamente.
Está asentada la cauesera de Aculma en vn llano, al pie de vna loma llana, en raso no tienen ninguna fuente, pasa por el dicho pueblo el rio que dicen de San Juan, dividido en tres asequías de agua con que riegan gran pedazo de tierra casi uva legua en largo e media en ancho; es fértil de pastos y de mantenimientos.
En tiempos pasados fue mucha jente, no supieron los naturales desir el nuemero sierto, mas de que en cada casa avia seis o siete indios casados, sin los mozos solteros, los cuales se an muerto de enfermedades que se le han recrecido; tiene el día de oy myll e novecientos y noventa tributarios por la quenta dela tasación; estápoblado sin orden y no pueblo formado, es jente bien dispuesta avnque de torpes entendimientos, vienen de labranza; la lengua que generalmente se usa entre ellos es la mexicana y algunos pocos ablan la lengua otomy.”(3)

Esta descripción de 1580 no nos habla aún de las inundaciones que anegaron la comarca.

“En el año de 1629 se registró una inundación por la que el convento agustino quedó anegado, año en que se cree empezó el desplazamiento de los pobladores, ya que el agua subió vara y media”. Para 1645, menciona el párroco de aquél entonces, que la iglesia de Acolman sufrió otra inundación en la que se perdieron varios libros del archivo. Otra invasión de las aguas se presentó entre los años 1763 y 1772 la cual provocó el total abandono del templo” (4)




3. Juárez González Araceli Guillermina .(1999) Acolman, Monografía Municipal pag.53 y 54
Idem, pag 60


Esta foto registrada por el INAH en una guía oficial de 1978 escrita en inglés nos ilustra: “Fig.3. For many years the building was in silt to depth of almost 5 feet. The restoration works began in 1920 and now it is possible to have a view of the original size.”
En la página 18, la guía citada nos dice que:

“As a result of the already mentioned dam, the edifice was inundated and buried in mud to the depth of one meter fifty centimeters (nearly 5 feet). The ground level rose all around the monument and the perfect proportions of the façade were radically altered. Starting in the year 1920, the then, Inspección General de Monumentos began to restore de monastery as far as possible. The earth banked against the base of the wall was removed. But it was impossible to lower the level of the surrounding grounds to any great extent, a system of terraces was created which now permits the visitor to appreciate the monument’s original proportions”. (4)

Especies
Actualmente el atrio de Acolman está forestado con una variedad desordenada de especies, donde encontramos eucaliptos, casuarinas, fresnos, cipreses y algunos arbustos. Carece de diseño y de orden rector, excepto en el área libre de la explanada de acceso, la que felizmente ha impedido que se siembren en ella árboles que obstruyan la vista de la fachada de la iglesia.

La huerta

Francisco del Paso y Troncoso, citado en la Monografía Municipal de Atenco (1999) cuenta que en 1580 la población de Atenco se había visto muy disminuida por enfermedades y que




“ Ay un monasterio de frailes de la orden de San Agustín, en que ay un estudio donde se lee gramática; rresiden en él veinte e quatro rreligiosos, los cinco saserdotes para el admynistración de la dotrina a los naturales: tienen vn templo muy solemne de boueda y vna buena huerta dentro del monasterio en que se coje cantidad de nueses de España y guindas y seresas y sirguelas en cantidad; fundose el monasterio el año de myll e quinientos treinta e nueve, siendo prouincial de la orden de San Agustín el benerable padre Frai Jorje Dáuila.”(5)

Vemos que para 1580 había frutales y nogales en la huerta del convento. Sabemos que los frutales europeos no prosperaban en estas tierras y fue hasta que se injertaron en el nativo tejocote (crategus mexicana) que dieron buenos frutos. (6)
4. INAH. Official Guide, 1978, pag 11
5. Juárez González Araceli Guillermina Op. Cit. pag.55
6. Tonatiuh Romero Contreras et.al.(2004). Las estrategias de transporte y adaptación de las especies agrícolas del viejo mundo hacia la Nueva España. Ciencia Ergo Sum. Universidad Autónoma del Estado de México.

Pensamos que lo que fue esa antigua huerta se localiza intramuros del complejo en el ángulo sur-oriente donde hoy el terreno ha sido elevado como en caso del atrio.

Talud de piedra apócrifo en la antigua huerta


Actualmente la huerta ya no existe, la tierra ha desaparecido bajo pavimentos pétreos que sin duda contribuyen a saturar los drenajes y que distorsionan el antiguo aspecto doméstico y humano que proveía este espacio cultivado para el consumo cotidiano de la orden. Un gran talud de piedra sustituye la antigua huerta y resulta desconcertante por su perfil prehispánico de reciente factura.

“Para México, los lugares donde se cultivaron con éxito tanto las hortalizas como frutales del Viejo Mundo fueron en principio los mismos huertos y jardines irrigados de la anterior nobleza de la Triple Alianza (México, Tacuba y Texcoco), y después se escogieron lugares ex profeso para dicho fin (Tetela-Ocuituco, Atlixco-Puebla, Querétaro, Jiquipilco), tanto en conventos como en huertas y terrenos particulares.
Una de las estrategias más importantes para la integración y adaptación de las especies agrícolas exóticas del Viejo Mundo en la Nueva España fue la utilización del injerto sobre

patrones nativos; sobresale el caso de la uva sobre el patrón de uva americana; y para los frutales, sobre todo de la familia de las rosáceas (pera, manzana, membrillo, durazno y
chabacano), sobre el patrón del tejocote (Crataegus mexicana). Nuevos problemas se presentaron aún después de la aclimatación y adaptación de estas especies, como fue el aprendizaje del comportamiento de nuevos calendarios agrícolas en dicha integración. De igual forma lo fueron las enseñanzas y extensionismo agrícola hacia las comunidades indígenas, hecho por campesinos hispanos, religiosos, conquistadores y encomenderos, quienes influyeron en el traslado y cultivo de las nuevas especies, como también poco a poco en la cocina y gustos culinarios.”(7)

El entorno

Acolman ha permanecido como una mole en medio del altiplano debido al abandono de sus pobladores y de los propios frailes que lo dejaron en 1763. Una ficha técnica exhibida en el inmueble nos dice que después de las graves inundaciones del siglo XVII los monjes abandonan el claustro, mismo que queda ocioso por espacio de 18 años y en 1781 es tomado por el clero secular, pero “su deterioro siguió un proceso acelerado. En 1925 sucedió la última gran inundación. En 1920 se iniciaron las obras de rescate, restauración y conservación de este inmueble”. (8)

Esta es la soledad que acompañó por siglos a esta noble construcción y a la que nos tuvo acostumbrados hasta que una vía rápida se construyó a escasos 200 metros hacia el sur. Así mismo el turismo que atrae este sitio histórico es atendido por una pequeña serie de negocios de construcción semi estable...

.

Convento de Acolman 2005 (foto Google Earth) Sus alrededores, nótese la carretera en el . . ángulo sur-oriente (foto Google Earth)

7. Idem. pag.245
8. cfr. Ficha técnica exhibida en el museo de sitio.


Hoy los terrenos traseros, colindantes, están en venta, son propiedad privada y se corre el riesgo que en ellos se levante cualquier tipo de construcción precaria. La monumentalidad del complejo de Acolman corre peligro por este hecho. Su impresionante estampa quedaría disminuida por la invasión urbana .

Aspectos estructurales

Las estructuras del complejo conventual son muy masivas pues en su concepción intervinieron requerimientos religiosos pero también defensivos. Los materiales principales son las piedras volcánicas como el tezontle y el basalto, así como el mortero para unirlas hecho con cal, arena y otras adiciones para incrementar la dureza, como arcilla calcinada y molida o tezontle pulverizado (picadiz). En algunas partes se tienen elementos de madera y otros hechos con ladrillos. Por ser una construcción del siglo XVI es de esperarse que presente deterioro acumulado y posibles deformaciones por asentamientos del terreno de sustentación, es posible también que se hayan hecho modificaciones y adiciones en diferentes épocas. Por lo tanto resulta recomendable, sino es que necesario, realizar el diagnóstico estructural que permita establecer las condiciones estructurales actuales, estimar el margen de seguridad y estudiar su posible vulnerabilidad sísmica, y a partir de esto establecer los criterios básicos para su conservación y en su caso la consolidación.

En cuanto a la superestructura se requiere estudiar los materiales, hacer un recuento de las características actuales incluyendo el posible daño y deterioro, así como elaborar un modelo analítico que permita estudiar su comportamiento , por ejemplo usando técnicas de macro-elementos (10) o bien otros procedimientos desarrollados recientemente (11), con lo cual se puede estimar la vulnerabilidad y en su caso proponer medidas de reparación o refuerzo.





(10) Lagomarsino, S., 1998”A new metodology for the post-earthquaque investigation of ancient churches”, Proc. of the XI European Conference on Earthquake Engineering, Paris.
(11) Lang, K and Bachmann, H., “On the seismic vulnerability of existing unreinforced masonry buildings”, Journal of Earthquake Engineering, Vol. 7, No.3 (2003) pp 407-426

El asunto de la interacción de la estructura y su cimentación con el suelo reviste especial importancia por lo masivo de la construcción y las características del subsuelo. Los sondeos que se han hecho en lugares relativamente cercanos para desarrollos habitacionales, indican que existe una capa vegetal de espesor aproximado de 0.4 m seguida de un estrato de 1.0 a
1.5 m de limo arenoso color café claro, de mediana a alta plasticidad y en seguida un
estrato de espesor muy variable, que puede llegar a varios metros de profundidad, compuesto de arcilla arenosa color café claro de mediana plasticidad. Los materiales predominantes en la zona son limos y arcillas, pero sus condiciones son variables presentándose lugares con limo de alta compresibilidad, en otras limo de baja compresibilidad y en otros más, arcilla de baja compresibilidad. Tomando en cuenta lo anterior es de esperarse que se tengan afectaciones locales por lo heterogéneo del suelo. Por otro lado el nivel de aguas freáticas está por debajo de los 5.0 m pero el contenido de humedad en los estratos superiores es alto (mayor de 60%). El nivel de aguas freáticas ha disminuido paulatinamente en la zona debido a la explotación de los mantos acuáticos subterráneos por lo que es probable que se presenten problemas de agrietamiento del terreno, por lo que se hace necesario realizar estudios para establecer si ha ocurrido o puede ocurrir este fenómeno. Tampoco se puede descartar el problema de posibles inundaciones que frecuentemente se han dado de forma catastrófica, por lo que este tema también requiere estudio detallado. Por las características del subsuelo es de esperarse que se tengan asentamientos de consideración para cargas que impliquen esfuerzos superiores a 3 o 4 toneladas por metro cuadrado, por lo que es muy probable que ya se hayan dado asentamientos importantes durante su existencia, es decir, se justifica la apreciación de que el pesado inmueble ha sufrido hundimientos importantes, por lo que se hace necesario estudiar sus efectos.
El nivel de los patios es más bajo que el terreno circundante.

El claustro no ha conservado las pinturas murales
debido a las inundaciones. Se observan las piedras
sustituidas en alguna restauración.



De esta breve descripción de aspectos estructurales, se concluye que existen elementos suficientes para establecer la necesidad de realizar estudios de campo consistentes en sondeos profundos en el suelo, la investigación de los materiales y el levantamiento completo del inmueble en sus condiciones actuales, incluyendo el estudio de daños y deterioros. Con los datos de los trabajos de campo se deberá proceder a la realización de un diagnóstico estructural completo y detallado que permita establecer criterios para su conservación.

Recomendaciones

No sería difícil reconstruir la huerta que cultivaron los monjes en el s.XVI para darle vida, escala y sentido al espacio original.
Para mantener la grandiosidad del conjunto sobre el paisaje es necesario que el INAH tramite la adquisición del predio trasero que consta de 11,000 m2 y que se vende en este año 2006 a $ 350.00 por m2.
Es recomendable devolver su verdadera escala al atrio del gran complejo conventual retirando el material de relleno, devolviéndole el nivel original y, para evitar el volteo de la barda atrial, retirar también el material del lado externo. De esta manera las puertas del atrio lucirán completas y no disminuidas.
Motivo de otro trabajo será proponer un rediseño de la vegetación del atrio, un proyecto respetuoso del sitio y de la vegetación nativa.


Bibliocibergrafía
INAH. Official Guide, 1978, pag 11

Juárez González Araceli Guillermina.(1999) Acolman, Monografía Municipal pag.53 y 54
Lagomarsino, S., 1998”A new metodology for the post-earthquaque investigation of ancient churches”, Proc. of the XI European Conference on Earthquake Engineering, Paris.

Lang, K and Bachmann, H., “On the seismic vulnerability of existing unreinforced masonry buildings”, Journal of Earthquake Engineering, Vol. 7, No.3 (2003) pp 407-426

Kubler, George.(1978) Arquitectura Mexicana del s XVI. Fondo de Cultura Económica.

Manrique Castañeda Leonardo. (1991) La observación astronómica en el México prehispánico. Eclipses en México SEP. INAH. Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica. pags.41-42

Romero Contreras Tonatiuh et.al.(2004). Las estrategias de transporte y adaptación de las especies agrícolas del vi ejo mundo hacia la Nueva España. Ciencia Ergo Sum. Universidad Autónoma del Estado de México.

. Ficha técnica exhibida en el museo de sitio.
www.conaculta.gob.mx/saladeprensa/2003/03ene/arqueastrono.htm

viernes, 5 de noviembre de 2010


La Casa del Poeta
Publicado en CAMBIO Estado de México 65, octubre 2010

El mes pasado falleció a los 84 años la poetiza Carmen Rosenzweig. Acudí a su velorio desconcertada, no sabía que hubiera estado enferma; conversé y me carcajee con ella no mucho tiempo antes durante un desayuno del Ateneo del Estado de México. Me regaló entonces su poemario Volanteo, editado por la Biblioteca Mexiquense del Bicentenario en la serie Letras de la Colección Mayor. Fui volanteando sus poemas por las noches y a través de ellos conocí mejor a Carmen, pero no nos volvimos a ver para comentarlo.
Supe por su hermana que Carmen murió a consecuencia de un accidente casero, supe por Graciela Santana que la casa de Carmen no estaba a la altura de sus poemas. Supe por Inocente Peñaloza que Carmen tenía algún tipo de plaza o beca del Instituto Mexiquense de Cultura y supe por Margarita García Luna que Carmen estuvo internada largos días antes de fallecer.
Saliendo de velorio, la ciudad de Toluca me mostró sus casonas vacías y abandonadas, tan bien hechas y de la misma edad de Carmen. La ciudad vacía. Por la calle de Humbolt me asalta un cartel de SE VENDE en la fachada de la Vecindad del Hoyo, una propiedad elegante como pocas con arcos de tabique aparente. Me surge la idea de que los amigos de Carmen Rosenzweig debemos adquirir la propiedad para convertirla en La Casa del Poeta.
Supe por Juan Villoro que, en la Ciudad de México, la Casa del Poeta funciona en el edificio donde murió Ramón López Velarde, el poeta pobre que no tuvo casa y que rentaba un cuarto en el centro de la ciudad. (Su reciente artículo Suave Patria en el diario Reforma del 17 de septiembre es un homenaje a López Velarde y al México limpio y sencillo que todos echamos de menos). Regreso a la esquina de Humbolt y León Guzmán, tomo el número del anuncio de venta, llamo y me disparan la cifra de nueve millones trescientos mil pesos. Me desmorono. ¿Cuántos amigos debería yo juntar para entre todos adquirir la propiedad? Necesitaría conseguir al menos 930 amigos dispuestos a colaborar con diez mil pesos cada uno para la Casa del Poeta y al menos otros 200 amigos más para poder restaurar la casona y volverla un palacio de poesía viva, de lecturas, de hospedaje para poetas viejos, de charlas en el patio, de libros y de volanteos.
Debo reponerme y no darme por vencida. Veré qué puertas toco, qué proyecto viable puedo ofertar a algún inversionista. Carmen se merece el esfuerzo y la ciudad de Toluca también. Toluca la bella, todavía existe y puede revivirse. La Vecindad del Hoyo debe conservarse y con suerte llegará a albergar la Casa del Poeta mexiquense.