viernes, 31 de enero de 2014

CIUDADES POS INDUSTRIALES


LA CIUDAD POSINDUSTRIAL
publicado en CAMBIO del Estado de México # 104, enero 2014

En el corazón de muchas ciudades donde hubo industria hoy hay abandono. Desde Detroit hasta Azcapotzalco. Paisajes de chatarra ennoblecida por las hierbas, algunos fueron convertidos en Parques Temáticos como la Fundidora de Monterrey. Otros como las sombrías bodegas del puerto de Buenos Aires se transformaron en el elegante barrio de Puerto Madero. Tecno Parque en Azcapotzalco es ahora un diligente centro de negocios.

En Toluca la Cervecería ha sido convertida en Museo y los terrenos del corredor industrial no consolidados como industriales hoy reciben universidades y centros comerciales. Así son las ciudades, mutantes.

Me llama la atención un lote grande recientemente demolido hasta los cimientos, el de la antigua empresa CELANESE junto al Panteón Civil de Toluca; llama la atención porque en él se puede hacer ciudad, es decir, se pueden trazar calles y comunicar el norte con el sur de la ciudad a la vez que echar a andar un mundo de actividades mixtas: habitacionales, comerciales, de servicios y de esparcimiento. Considero una oportunidad urbana importante lo que se haga en esas cinco hectáreas posindustriales.

 


Para tener un comparativo conocido, el espacio del que hablamos equivale a dos alamedas, o a cuatro manzanas céntricas toluqueñas. Median 710 metros entre la avenida Fidel Velázquez y la esquina de la Policía Federal, por lo que penetrar esa gran manzana con calles arboladas será humanizar ese sector de ciudad, será permitir su recorrido de manera peatonal, será comunicar el norte con el sur, será atraer vida a una zona despoblada. Aventuro el siguiente esquema, sin pretender que sea el único posible.

 


Consiste en:

·         Abrir un boulevard de doble sentido con camellón central que una la Av. Morelos con el Paseo Tollocan

·         A medio camino establecer una glorieta que nos permita acceder a una nueva entrada al Panteón

·         Crear cuatro manzanas para usos mixtos (comercio y servicios en planta baja y vivienda en plantas altas

·         Reabrir la calle Marie Curie a su cruce con el ferrocarril

Dado que, según entiendo, este gran lote posindustrial es ahora propiedad del Gobierno del Estado de México, será interesante ver con qué diseño urbano será desarrollado.

domingo, 5 de enero de 2014

Zurcir la ciudad de Toluca


URBANISMO.




En esta foto aérea de Juan Arturo Guadarrama Vázquez que se exhibe en la Casa de las Diligencias se observa claramente cómo las vías rápidas dividen el territorio, porque existe contacto visual entre el Hospital de Oncología a la izquierda y el Parque 18 de Marzo a la derecha, pero es imposible para los pacientes hacer uso del parque, porque no se puede cruzar a pie la avenida Las Torres. Tampoco sería una solución condenar a los pacientes o a sus familiares a subir 52 escalones de un puente peatonal y volver a bajarlos para acceder a él, porque el paseo se tornaría en una travesía pesada y desagradable. Los peatones debemos poder  caminar la ciudad y los vehículos deben detenerse para dejarnos pasar. La esencia de la ciudad son los ciudadanos, no las vías rápidas.

A espaldas del mencionado Hospital Oncológico existe otro parque, el Metropolitano, pero tampoco los pacientes tienen acceso a él ya que está bardeado en rededor, lo que impide  su acceso, su cruce a campo traviesa e incluso se impide su vista. La foto del estudiante de gestión urbana Guillermo Ozornio lo muestra con claridad.

 

                                                                                  

Ni banqueta existe en esta calle perimetral del parque. Banqueta que podría hacerse y que gozaría de arbolado maduro instantáneo. Una reja arremetida tres metros en lugar del muro permitiría mejorar la imagen urbana del sitio y la calidad de vida de sus vecinos. En la situación actual el magnífico Parque Metropolitano no cumple su cometido de servir a la sociedad, ya que da la espalda a propios y a extraños. Ni los vecinos aledaños ni los forasteros que llegan a los hospitales cercanos (recordemos también el Mónica Pretelini) gozan de la vista del parque porque éste sólo se abre a quienes llegan  por el Paseo Tollocan.

El área del Parque Metropolitano equivale a 17 manzanas de la colonia Universidad, son 23 hectáreas con un solo acceso. Es mucho terreno enajenado de los barrios circundantes, es un sinsentido. Tanto equipamiento y tan poca urbanidad. Tanta inversión y tan poca belleza en rededor. Tanta construcción y tan poca calle, tanta seguridad y tan poca humanidad.  Falla el diseño urbano que nos integre, nos provea movilidad y nos de bienestar; que demuela las bardas ciegas del parque, que abra accesos a los cuatro puntos cardinales, que no regatee su usufructo.

La inversión pública existe, falta que se demuelan las fronteras entre las instancias de gobierno de distintas esferas que deciden displicentes sin entender que la ignorancia puede hacer mucho daño. Ignorar la escala humana hace daño a la ciudad.